Problemas en el 475

Tapar los registros en el distribuidor vial 475 sólo empeorará las inundaciones en La Noria: vecinosstatus - Javier Puga Martínez


En la imagen, un hotel colocó una barda de casi 50 metros de largo por uno de alto con sacos de arena que sirven para poder contener la inundación provocada por el distribuidor vial 475 cada vez que llueve en el estacionamiento / Foto: José Castañares
Lejos de ordenar el deficiente drenaje del distribuidor vial 475, que a principios de este mes ocasionó inundaciones y pérdidas económicas en los domicilios de los habitantes de la colonia Villa Florencia, la empresa Caminos y Puentes de Chihuahua optó por tapar los registros del drenaje para que las aguas negras ya no salieran expulsadas a la calle en caso que caiga una tormenta como la del día 6 de junio. “Sólo vinieron a empeorar las cosas; con los registros tapados nuestros drenajes van a explotar”.

Así lo mencionaron vecinos de esta zona, quienes además se quejaron de que a la fecha no han recibido una sola respuesta de parte de la constructora para el pago de sus pertenencias y mercancías que quedaron en estado inservible con las aguas negras.

En tanto, el presidente municipal de Puebla, Enrique Doger Guerrero, rechazó las afirmaciones de los colonos y reiteró que ahí se están realizando trabajos de calidad que garantizarán a los habitantes que no volverán a tener perjuicios en sus domicilios; sin embargo, dijo que pedirá una explicación en Obras Públicas para saber por qué no se ha pagado a los perjudicados.

“La solución técnicamente fue la más adecuada, ya no es una tubería, sino un registro, una caja, construida con cemento, con lo cual no habrá problema de colapso y cualquier lluvia que se presente se va a desfogar en esa zona”, afirmó el edil.

La mañana de ayer La Jornada de Oriente realizó un recorrido por los trabajos que se realizan en el distribuidor. Unos albañiles tapaban uno de los dos registros que ocasionaron el desperfecto. Del otro lado del 475, en la lateral que comunica la vía Atlixcáyotl con el circuito Juan Pablo II, también se están realizando trabajos de albañilería.

Un conocido hotel que está entre el distribuidor vial y el centro comercial La Noria colocó una línea de casi 50 metros de largo por uno de alto con sacos de arena que sirven para poder contener la inundación que provoca el 475 en el estacionamiento subterráneo del hotel cada vez que llueve, manifestó un trabajador a este medio.

Pero para el director de Vialidad y Transporte de la Secretaría de Administración Urbana, Obra Pública y Ecología (SAUOPE), Julio Aarón Robles, los trabajos en la obra municipal ya concluyeron, por lo que en los próximos días ya se podrá circular en por ahí.

El distribuidor vial 475 llegó a cambiar la vida ahí, y lo que antes era una zona comercial activa ahora está desolada. Muchos negocios del lugar quebraron y ya hay quien quiere vender su domicilio ante los problemas que seguirá ocasionando el drenaje. Así lo comentó Alejandro Méndez Ramírez, propietario de una papelería ubicada a un lado de la megaobra, y principal afectado por los problemas en el desagüe de la vialidad.

Aseguró que en esta misma semana comenzará a recolectar unas 120 firmas de vecinos para apoyar un documento en el que solicitarán una entrevista con el presidente municipal a fin de explicarle personalmente la situación que están viviendo, pues por parte de la Dirección de Obras, que encabeza Gerardo Sordo Sanz, no hay una respuesta clara. De continuar sin atención, junto con los vecinos de la calle 25 Sur, que también fueron perjudicados con la edificación, realizarán una serie de bloqueos al 475.

“Estuvo muy mal hecho. Mucha gente se ha atorado en la subida del distribuidor, se hacen colas (de autos) espantosas porque nada más hicieron un carril, la gente se pone muy pesada y es una tocadera de claxon (sic). Entonces los conductores se bajan, empujan el auto atorado o descompuesto hasta la bajada, se regresan todos corriendo para subirse a sus autos y hasta entonces fluye el tráfico. Allá arriba hay rayones de carros que siempre se pasan de largo. En la entrada del puente los camiones avientan lámina (sic) y no dejan pasar a los autos, provocando accidentes”, afirmó Méndez.

Agregó que no tuvo caso haber hecho el puente elevado de la 25 Sur, porque pudo estar como a ras de suelo, como la vía Atlixcáyotl, que se convierte en la 23 Sur al cruzar el 475. Dijo que con el distribuidor su negocio perdió hasta el 90 por ciento de sus ventas; esperará dos meses más antes de cerrarla definitivamente. En unas semanas más va a poner su casa en venta para ya no padecer los problemas de drenaje del 475. “Finalmente afectaron a todos los vecinos; allá están todos molestos porque no tiene caso; sólo hicieron la obra esplendorosa, pero no tiene una utilidad real”.