Enrique Núñez - Contracara
Pese a que el expresidente municipal ha dicho categóricamente que los autos donados a Cáritas estaban en condiciones inservibles como auténtica chatarra, documentos en posesión de Intolerancia Diario revelan que una parte considerable de esos vehículos está circulando después de que fueron adquiridos y dados de alta por particulares, los cuales a su vez fueron adquiridos en lotes de autos usados.
Dentro de la lista de automóviles en circulación, se encuentran los siguientes:
Tsuru GSI modelo 2000 con placas de circulación TRL6504, comprado y dado de alta por Ambrosio Sánchez Santamaría, con fecha 28 de abril de 2008.
Camioneta Dodge Ram 1500 Custom, con placas de circulación S455195 modelo 2001 tipo pick up, comprado y dado de alta por Adolfo Recoba Sánchez el día 16 de mayo de 2008.
Jetta GLS modelo 1998, con placas de circulación TVS2030, adquirido por Rubén Macías García el 20 de mayo de 2008.
Nissan Estaquita 1990 color blanco, adquirida por Gerardo Pimentel Romero y dada de alta el 16 de mayo de 2008.
Estas unidades formaron parte del parque vehicular del ayuntamiento de Puebla y son las mismas que fueron donadas a Cáritas al finalizar la administración de Enrique Doger.
Esto echa abajo la versión del expresidente, quien aseguraba que los vehículos a los que hizo mención Intolerancia Diario la semana pasada eran parte del lote que terminó en custodia del DIF municipal.
Además, se confirma que los vehículos en cuestión se encontraban en condiciones de seguir circulando y no podían ser considerados como chatarra.
Incluso, las facturas de estos vehículos demuestran que su precio comercial rebasa por mucho el precio con el que fueron tasados al momento de ser rematados.
El lote cambió de manos tres veces en un día
Un dato que revela la componenda entre los funcionarios municipales, los dirigentes de Cáritas y los compradores de la supuesta chatarra es que el 16 de mayo de 2008 se celebraron los contratos en el que Cáritas le “vende” a Prestadora de Servicios Independientes o Generales SA de CV (Preser), y ese mismo día, Preser le vende a Francisco Gómez Cisneros, utilizando los mismos machotes y cambiando únicamente los nombres en los cabezales. De esta forma se demuestra que los bienes que donó Doger como inservibles tenían un alto valor en el mercado y que en un sólo día se revendieron estos bienes, los cuales fueron disfrazados como basura.
Estos contratos se entregaron a los compradores de los autos, respaldando así la propiedad de los mismos, además de las actas de Cabildo en las que se “aprobó” la donación a Cáritas.
Las mentiras, un estilo de vida
Con todo lo anterior, se demuestra que Doger mintió cuando, ante las cámaras de Televisión Azteca, aseguró que los vehículos eran modelos de los años setenta y ochenta; y que los vehículos recientes como los 2000 no habían sido donados a Cáritas y que pertenecían al DIF.
Una vez más se confirma que el expresidente municipal ha convertido la mentira en una forma de vida.
Como perritos sin dueño
El día de ayer, en medio de la rebelión de los diputados de oposición en la que argumentaron que no fueron tomados en cuenta a la hora de redactar el proyecto de reforma judicial, tres despistados diputados del PRI hicieron su propio berrinche, abandonando el evento como si formaran parte de las filas opositoras.
Envalentonados, Rocío García Olmedo, Luis Alberto Arriaga y Mario Méndez se salieron del salón sin darse cuenta de que le hacían el caldo gordo a sus odiados opositores.
Independientemente de la razón que puedan tener los legisladores de los otros partidos, los tres priistas cayeron en el juego, quedando como el cohetero.
Al terminar el evento, los tres caminaban como perritos sin dueño.
Ahora ni son de aquí ni son de allá.
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